El Parlamento Europeo ha aprobado que la carne que es utilizada dentro de los platos preparados y alimentos procesados, como por ejemplo la lasaña o las pizzas congeladas, deberá estar sujeta a las normas de etiquetado informando del país de origen de la carne, al igual que ocurre con la carne fresca. Así lo han establecido en una resolución aprobada por 460 votos a favor, 204 en contra y 33 abstenciones. Más información...